Precaución
El siguiente texto es completamente informal, esta ocasión no hablaré sobre mi trabajo, sino sobre algo más personal, así que no te recomiendo continuar leyendo o terminarán doliéndote los ojos. Sobre advertencia no hay engaño.
Con un pie afuera de la facultad era de esperarse que llegara de visita (o para quedarse) una vieja amiga, pero aún así logró sorprenderme su llegada, no la reconocía porque tenía algo de tiempo que no nos frecuentábamos. Tenía la idea de haberla visto cuando iba caminando en la calle distraída en mis pensamientos, pero no estaba segura de si era ella, hasta que hace poco me percate de su presencia. Después de saludarnos con el debido respeto, me comentó lo que me temía, se quedaría conmigo una temporada, no dijo cuanto tiempo pero parece que se volverá algo recurrente, porque como la buena amiga que es no se pierde esos momentos en los que hay grandes cambios, son sus favoritos y quiere hacer notar su importancia.
La verdad estaba tan dedicada en hacerla sentir bienvenida, que por poco no escucho que me dice muy satisfecha que ha visitado algunos de mis amigos, me había concentrado tanto en recibirla que no se me ocurrió que cuando no estoy en la casa sale a hacer de las suyas, lo cual me molestó pero a la vez me hizo sentir triste porque entiendo como puede ser de abrumadora su estadía para los demás. Quisiera pedirle que se fuera pero no quiero ser grosera como es mi costumbre.
Antes pensaba que contaría con ella por el simple hecho de querer dedicarme a las artes, pero en estos cinco años me he dado cuenta que no somos los únicos merecedores de tremenda amistad, cualquier universitario o simplemente cualquier persona ha tenido la dicha de tratar a mi querida amiga. Y no lo digo despectivamente, lo contrario, estaba tan absorbida por mantener esa amistad que no me daba cuenta que yo no era la única con la que se relacionaba. Algo muy egoísta para variar.
Así que yo creo que todos tenemos eso en común, ya sea a menor o a mayor medida, pero ahora creo que la mayoría ha tenido el gusto de conocer a la incertidumbre e incluso hacerla su amiga. Esperemos que sean visitas cortas.
Gracias por leer esto, como dije fue algo muy personal, espero que no te topes con ella.
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